El fin de la prueba
Diversas
teorías sobre el fin de la prueba judicial
En
esta materia, como en casi todas las relacionadas con las pruebas Judiciales,
hay diversas teorías, pero pueden reducirse a tres:
1.
La que considera como fin de la prueba Judicial el establecer la verdad;
2.
La que estima que con ella se busca producir el convencimiento del juez o
llevarle la certeza necesaria para su decisión;
3.
La que sostiene que persigue fijar los
hechos en el proceso.
ü Doctrina
que le asigna a la prueba judicial el fin de establecer la verdad. Defienden esta tesis, entre otros, Bentham,
Ricci y Bonnier. Esta teoría es inaceptable porque el resultado de la prueba
puede no corresponder a la verdad, a pesar de llevarle al juez el convencimiento
necesario para fallar. La mayoría de los autores modernos la rechazan
ü Teoría
que reconoce como fin de la prueba judicial el obtener el convencimiento o la
certeza subjetiva del juez. El fin de la prueba es producir en el juez la
certeza o el convencimiento sobre los hechos a que ella se refiere, certeza que
bien puede no corresponder a la realidad, es decir, que equivale a la creencia
subjetiva de que existen o no existen.
ü La
tesis que ve como fin de la prueba la fijación de los hechos del proceso. Esta
tesis está vinculada principalmente al sistema de la tarifa legal para la
apreciación de las pruebas. En razón de las dificultades que con tal sistema se
presentan para llegar al conocimiento de la verdad y de las mayores
probabilidades que con él existen de un divorcio entre ésta y la conclusión a
que forzosamente debe llegar el Juez, algunos autores, especialmente
Carnelutti, han hablado de la fijación formal de los hechos mediante esa tanta
legal
La
tesis correcta es la que reconoce como fin de la prueba judicial el obtener el
convencimiento o la certeza subjetiva del juez, toda vez que la verdad es una noción ontológica,
objetiva, y el conocimiento que creemos tener de ella es subjetivo. El fin de la prueba es darle al Juez el
convencimiento o la certeza sobre los hechos, que es la creencia de conocer la
verdad o de que nuestro conocimiento se ajusta a la realidad, lo cual le
permite adoptar su decisión; su fin se satisface, sea que esa certeza corresponda
a la realidad, en cuyo caso se estará en la verdad, o que se encuentre
desligada de ella y entonces existirá un error. La Justicia humana no puede
exigirá más, porque no puede aspirar a la infalibilidad